En Insurgente, ubicado en el Mercado de Chamberí, cada plato es una experiencia que combina tradición y creatividad. La empanada de birria mexicana sorprende con su relleno jugoso y especiado. Las croquetas de costilla a baja temperatura con gel de lima son una delicia: la textura suave y cremosa de la croqueta se equilibra con el toque ácido y refrescante del gel, creando un contraste único en cada bocado. La milanesa de secreto ibérico con mayonesa de huevo frito, que aporta un toque extra de sabor. La focaccia de ropa vieja, bañada en su propio jugo, resulta un plato reconfortante con sabores intensos y bien integrados. Por último, el tartár de atún con yema curada, mayonesa de miso y arepa de maíz crujiente es una opción sofisticada y llena de matices.
Insurgente sabe fusionar tradición y modernidad, convirtiéndolo en un destino imperdible para quienes buscan experiencias gastronómicas diferentes en Madrid.
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