Cuando vives fuera de tu país y echas de menos las cosas que te preparaba tu madre, o te decides a prepararlas tú, o comes... Era el 1989 y vivía en Londres, donde las croquetas no las veías ni en pintura, así que me decidí a prepararlas sin la ayuda de mi madre. Con el tiempo he ido mejorándolas y consiguiendo ese sabor tan especial que les daba ella. Cuántas veces le habré visto prepararlas y sin duda alguna para mí serán siempre las mejores del mundo.
INGREDIENTES
. 90 gr de harina
. 1/2 l de leche a temperatura ambiente
. 150 gr de pollo (cocinado) cortado muy fino
. 100 gr de jamón serrano cortado a dados pequeños
. 70 gr de cebolla picada muy fina
. sal
. 2 cucharadas de aceite
. nuez moscada al gusto
Para liar las croquetas:
. 2 huevos
. pan rallado
PREPARACIÓN
- En una sartén echamos el aceite, la cebolla, la sal y rehogamos a fuego medio.
- Cuando esté dorada añadimos el pollo y el jamón y los salteamos durante unos minutos.
- Incorporamos la harina y continuamos rehogando.
- Poco a poco vertemos la leche y cocinamos la bechamel durante unos 20 minutos removiendo constantemente hasta obtener una masa cremosa y homogénea.
- En una fuente ponemos la masa y la dejamos enfriar. Cuando esté a temperatura ambiente la metemos en el frigo.
- Preparamos dos platos, uno con el huevo batido y el otro con el pan rallado.
- La sacamos del frigo y vamos cogiendo un poco de masa (depende del tamaño que os guste) y le vamos dando la forma de croqueta.
- Pasamos las croquetas primero por el huevo y después por el pan rallado.
- Freímos las croquetas en una sartén con abundante aceite o en una freidora.
- Comer calentitas
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