Después de todos los excesos culinarios, tenemos que darle un poco de tregua a nuestro estómago y que mejor que hacerlo con algo que además de saludable, está riquísimo.
Mientras vivía en Roma pude apreciarlas en sus distintas versiones y espero que también lo hagáis vosotros.
Esta receta es típica del Lazio, en concreto de Roma y se suele comer como acompañamiento de carne, pescado... Son fáciles de preparar, lo peor es limpiarlas.
. 8 alcachofas
. zumo de un limón
. 170 ml de aceite
. un vaso de agua
Para el relleno:
. 50 gr de perejil muy picado
. 1 diente de ajo
. sal
. menta fresca picada al gusto
. 8 ml de aceite de oliva
PREPARACIÓN
- Preparamos un bol con bastante agua y el zumo de un limón.
- Limpiamos las alcachofas. Eliminamos las hojas externas más duras, cortamos la base, quitamos las hebras externas del tallo y eliminamos la pelusa interior.
- Cogemos la alcachofa por la base y presionamos con fuerza sobre la tabla de cocina para que se abra.
- Las ponemos en el bol con el agua y el limón para evitar que se oxiden.
- Picamos la menta, el perejil y el ajo.
- En un bol ponemos el aceite y lo que hemos picado anteriormente. Mezclamos todos los ingredientes.
- Cogemos las alcachofas y las vamos rellenando por todo el interior.
- En una cacerola calentamos el aceite, ponemos las alcachofas y vertemos poco a poco el vaso de agua.
- Las dejamos cocer a fuego medio y con la tapadera durante unos 30 minutos. Si fuera necesario se le añade más agua, pero nunca superando la mitad de la base de la alcachofa.
- Cuando estén tiernas, estarán listas para comer.
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